Importancia en el ejercicio físico


La falta de ejercicio físico se extiende cada vez más en la sociedad, y esto, repercute considerablemente en la salud general de la población mundial, en la prevalencia de enfermedades como la diabetes, enfermedades cardiovasculares, obesidad, etc.
La inactividad física constituye uno de los factores de riesgo más importantes de mortalidad en todo el mundo, sólo la superan la hipertensión, el consumo de tabaco y el exceso de glucosa en la sangre.
Es por ello que se aconseja la práctica de actividad física  de forma regular, ya que reduce el riesgo de diversas enfermedades como cardiopatías coronarias y accidentes cerebrovasculares, diabetes de tipo II, hipertensión, cáncer de colon y depresión.
Además, la actividad física es un factor determinante en el consumo de energía, por lo que es importante para conseguir el equilibrio energético y el control del peso.

Recomendaciones sobre actividad física para mejorar el estado de salud
Con el objetivo de mejorar las funciones cardiorrespiratorias y musculares, la salud ósea, así como reducir el riesgo de enfermedades, se recomienda:

Ø  Todos los niños y jóvenes deberían realizar diariamente actividades físicas en forma de juegos, deportes, actividades recreativas, educación física, en el entorno familiar, la escuela… Es aconsejable un mínimo de 60 minutos diarios de actividad física moderada o vigorosa. Esta debería ser, en su mayor parte, aeróbica. Conviene además incorporar, al menos tres veces por semana, actividades vigorosas que refuercen los músculos y huesos.

Ø  Para los adultos es aconsejable un mínimo de 2h 30 min semanales, de ejercicios aeróbicos de intensidad moderada.

Ø  Se recomienda la misma cantidad de ejercicio que en los adultos para los grupos de edad a partir de los 65 años, excepto aquellos que presenten movilidad reducida, que en este caso deberían realizar ejercicios de equilibrio para impedir el riesgo de caídas, durante tres o más días a la semana. Los que no puedan realizar la actividad física recomendada debido a su estado de salud, se mantendrán físicamente activos en la medida en que se lo permita su estado, mediante ejercicios pasivos (movilizaciones pasivas) para mantener la función muscular y articular.